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Management

Plan sanitario: ¡no lo dejemos al azar tranqueras adentro!

El MV Antonio Castelletti brindó detalles sobre el destete bovino y la importancia del veterinario en el seguimiento del plan sanitario.

Por Antonio Castelletti 22 de agosto de 2024 - 12:19

El objetivo del productor de cría bovina es obtener un ternero por vaca por año, lograr la mayor cantidad de kilos por hectárea, donde existen variables de impacto que pueden mejorar este objetivo como son: altos % de preñez, distribución de la preñez (cabeza, cuerpo y cola), bajas diferencias preñez-destete y terneros pesados y tempranos.

Todo esto, en un marco en el cual los niveles de destete a nivel nacional son bajos, se destetan 6 terneros cada 10 vacas.

En muchos casos, el retraso o las mermas son causadas por falta de tecnología, principalmente de procesos, en otros pueden ser por problemas sanitarios y en otros, de manejo.

Pérdidas directas

El costo por no destetar un ternero, según el MV Bernardino Becwith, incluye: el valor de un ternero muerto, el de un campo extra que ocupó el vientre preñado (para no producir nada), la diferencia entre la calidad de campo de un vientre preñado versus la de uno de un vientre vacío y el valor genético invertido.

El plan sanitario puede ser una guía en el seguimiento y control de los procesos. Y alcanzar los objetivos productivos depende que las distintas variables estén supervisadas, controladas y con un acompañamiento de un profesional veterinario.

Los veterinarios deben tener una planificación estratégica de la producción para poder lograr los objetivos que se planteen. Cuando hablamos de administración de objetivos, estos objetivos deben tener ciertas características: específicos; medibles; orientados a la acción; realistas y por un tiempo determinado.

El plan sanitario puede ser una guía en el seguimiento y control de los procesos. Y alcanzar los objetivos productivos depende que las distintas variables estén supervisadas, controladas y con un acompañamiento de un profesional veterinario. El plan sanitario puede ser una guía en el seguimiento y control de los procesos. Y alcanzar los objetivos productivos depende que las distintas variables estén supervisadas, controladas y con un acompañamiento de un profesional veterinario.

Esos objetivos generalmente son plasmados en el porcentaje de preñez, parición y destete que se quieren lograr, donde el plan sanitario y el seguimiento del veterinario es crucial para lograr los objetivos planteados.

En muchos casos el veterinario deja un plan sanitario para que se realice en el campo, en manos del propietario y los empleados la ejecución.

Interacción

Debemos dejar en claro que no existe un plan sanitario único y son los veterinarios quienes, según las características productivas, ubicación geográfica, manejo y otros factores de riesgo diseñan el plan.

Luego, se deberán determinar los parámetros productivos a lograr: que se preñen la mayoría de las vacas, una parición sin problemas, que las hembras se preñen lo antes posible, destetar terneros con buena salud y peso.

¿Dónde está el plan sanitario?

Muchas de las veces que se realiza esta pregunta en un establecimiento ganadero nos encontramos con que no está a mano el plan sanitario, en algunos lugares más organizados cuentan con infografía de este o está simplemente impresa, lo que permite que se le pueda dar seguimiento. A esto, tendremos que sumar la planificación de compras y manejo del stock. ¿Por qué? El plan sanitario por categorías nos permite determinar las necesidades de mensuales de productos, por categoría determinando las dosis y frascos necesarios.

El chequeo rutinario del stock de los productos nos permite ver las fechas de vencimiento de los productos permitiendo de esta manera determinar o evaluar la cantidad de productos que nos queda con buen vencimiento para el uso del producto en el momento adecuado que indica el veterinario.

Registro de información

El registro de la información del plan sanitario y de los eventos internos permiten dar seguimiento a la implementación y detectar posibles problemas, dependiendo de la casuística. Dentro de lo que podemos registrar, podemos enumerar.

» Fecha de aplicación de producto, dosis y producto utilizado, categoría y laboratorio, fecha de vencimiento del producto, lado de aplicación, responsable de aplicación.

» Calendarizar las 2 o más dosis que se debe aplicar para respetar los tiempos recomendados por los laboratorios para garantizar la inmunidad.

» Tratamientos individuales y tratamientos masivos, anotando la fecha, sintomatología, cantidad de animales afectados, categoría y sistema, cría o invernada.

Esa información luego deberá ser analizada por el profesional. ¿De qué? Puede ser el análisis de procreo del establecimiento, es recomendable que pueda evaluar los registros antes mencionados para evaluar si es necesario realizar algún tipo de cambio al plan sanitario propuesto.

Finalmente, la capacitación continua del personal del campo, así como también la empatía que debemos tener con el personal del campo es crucial para la ejecución del plan y seguimiento. Tener del lado del profesional aliados internos en los campos es parte del éxito profesional de los veterinarios.

7 claves para poner en práctica

A la hora de repensar la interacción entre los profesionales veterinarios y los productores, será clave seguir este paso a paso:

1. No existe un plan sanitario único. Es el veterinario el responsable de determinarlo y ponerlo en valor.

2. Determinar los parámetros productos a lograr (objetivo concreto).

3. ¿Dónde está el plan sanitario en el establecimiento? Dar fácil acceso para que se pueda seguir de manera ordenada y sin problemas.

4. Tener presente que el seguimiento y cumplimiento del plan sanitario sirve para la planificación de compras y manejo del stock de productos.

5. Registros del plan sanitario en el campo. Es importante considerar esto para no perder tiempo y evitar errores.

6. Análisis de la información para evaluar cambios que también agregan valor al profesional veterinario y le permite un contacto más fluido con el productor.

7. Capacitación continua del personal para que nada quede al azar, porque si eso sucede, el plan no se cumple y los objetivos, no se logran.

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